De Pensamientos que sangran

Vine de lejos 
a colgar mi ambición de laureles ocultos.
Vine sin lástimas que acariciaran mi piel.


Llegué sola y fría
Cabalgando sobre la luna 
envuelta en manifiestos de avaricia
depositando ruina sobre ruina.


Supe de los entuertos más obscenos 
de las prisiones del alma 
de los leprosos 
cuyas llagas dormitan 
en corazones postrados, sobre rodillas azules.


Nada consuela la frágil cordura que maneja 
mi respiración 
apenas recuerdo mi nombre.
Apenas el sabor de quien amé.

1 comentario:

Regálame tus palabras...