Hoy he tenido la sensación
de que nada puede ir bien
o a lo mejor,
es que era hoy cuando tenía que tirarme
de donde tengo previsto tirarme
cuando mi cuerpo y mi cerebro estén de acuerdo.
Les he dicho muchas veces a los dos
una cantidad de mentiras...
Claro que piadosas
mentiras que me como luego
con un aliño propio de bárbaros,
una mezcla de pepiñillos con fresas y chocolate,
ya sé que así de sopetón parece repugnante
pero es que la vida también asquea
y ya ves, aquí estamos...
Hoy podía haber sido el perfecto día
para decir basta
para decir la última frase
para cantar la última canción
para decir un adiós
sonoro y grande y largo
...Porque cuando me tire de donde
tengo previsto tirarme
cuando mi cuerpo y mi cerebro
no tengan ni ganas ni razones...
seguro,
que el adiós será así
como lo tengo previsto.
Espero que ese adiós no se produzca pronto. El blog es una pasada.
ResponderEliminarUn beso
Son tremendos estos versos, Bego. Rotundos, como tú misma.
ResponderEliminarAchuchón
no digas adiós, es una palabra triste, igual que tus versos
ResponderEliminarun abrazo con cariño
Josechu,
ResponderEliminarson cosillas que de vez en cuando se me pasan por la cabeza y mira, sale ésto.
Besos.
Jose Z,
Gracias, tiene que haber de todo, pero sí, son fuertecillos, la vida...
Abrazo
Ana,
Yo no diría triste, decir adiós, puede ser una liberación.
te envío un cariño.
Son tantas las veces que uno desea sentir la fuerza necesaria para ese adiós, pero a Dios gracias nunca llega ese día, o al menos creo que no llegará ni para ti ni para mí, nos atan las alas mucha sangre desde esta tierra. Me gusta, a pesar de la dureza y la tristeza,me gusta mucho.
ResponderEliminarbesoss
Eva
Eso me pasa a mí a veces, o a menudo. Pero mucho peor dicho, por que aquí está muy bien dicho.
ResponderEliminarMuchísimas gracias Begoña por aparecerte en mi blog y por decirme hoy que te ha gustado. Por estos aires y mantas nos vamos conociendo, será un verdadero placer.