menopausias sin pudores
varices irreductibles
impolutas madres del apogeo,
hijas de cimbreantes cuerpos
mujeres deseo
mujeres que arden
mujeres que claman,
irredentas mujeres.
Mujeres inmortales
mujeres promesa...
Diosas todas
paganas todas.
Yo,
la hija de la ira y el perdón
la hija de la lujuria y el abismo
la del estigma
la del don.
La hechicera,
os convoco
consagradas
veneradas todas,
os convoco
al clímax perpetuo
a la sublimación de los sentidos
al éxtasis,
un orgasmo irreverente
esplendorosamente femenino.
Una convocatoria conjurada de tal modo ha de tener éxito, seguro.
ResponderEliminarAchucón
No me apunto porque no estoy invitado, pero suena bien. Voy a correr la voz.
ResponderEliminarbesos
Olé, convocada me hallo, conjurada me siento, allá voy...!!
ResponderEliminarUn besito, Begoña.
Desde mi perspectiva de hombre, nada hay más hermoso que el climax de una mujer enamorada en tus brazos...una poesía valiente sin tapaderas, a pecho descubierto...enhorabuena por tu blog...un abrazo de azpeitia
ResponderEliminarApúntame.
ResponderEliminarVoy seguro.
Besitos.
la convocatoria de seguro tendrá una gran afluencia; me apuntas
ResponderEliminarun abrazo
y como no responder a esta convocatoria, seguiremos adelante!!!!
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