Las hay morenas
rubipecas, frescotonas
salerosas, habladoras
las hay mutiladas
de emociones
de refrescos anaranjados
de orgasmos
las hay corredoras de fondo
sabedoras de todos los oficios
licenciadas en matices humorísticos
en humores maritales
en picores subyugados
a secuencias de terror
noche tras noche de etílicos sudores...
Las hay harapientas
pulcras
impías
soñolientas
y sucias al atardecer
entre delantales almidonados
pañales sin mácula
y dolores de barriga.
Pero todas libran las batallas
del día a día
y ganan esta guerra,
la de hoy.
Entre todas las mujeres, Bego. Las hay de todo tipo, hasta asquerosas (cursis, intransigentes, lelas), yo conozco alguna y no sé si ganan batallas, más bien no libran ninguna porque no lo necesitan.
ResponderEliminarEsa última estrofa no tiene género: también los hombres batallamos para ganar esa gerra, la de hoy.
Con mis cariños.
Jose, te contesto rapidito que te he pillado. Estoy de acuerdo contigo, yo no creo en los géneros, creo en las personas, en las buenas... Este poemario qué no sé donde me llevará, trata de ver a la mujer desde todos los ángulos y ofrecerla en su realidad. Pero siempre para tod@s, y confío en que nadie se ofenda.
ResponderEliminarTe achucho largo
Tu si que eres una gran mujer.
ResponderEliminarabrazo inmaculado
me gusta esta oda a la mujer, a la mujer honesta, a la que libra batallas, queriendo, sin quererlas, batallas con causa o sin ella.
ResponderEliminarUn abrazo
Bego, mil gracias por estar tan cerca de mis retales, tengo pendiente escribirte por mail, pero se me quitan las ganas por tener malas nuevas q contar... estoy demasiado desánimada y estoy esperando acopio de fuerzas ... me encanta tu oda a la mujer y bien merecida por supuesto.
ResponderEliminarbesos