
y lejos de sentirte culpable
todavía persigues mi mente
atormentas mis sentidos.
Crees que tienes el don
de poseerme
que con sólo mover
una mínima parte de tu corazón
impío
lograrás hacerme presa
de tu gastada arrogancia.
Me has herido
y la higiene óptima del olvido
hará el resto del trabajo.
Vuelvo a tener acceso a los blogs. Veo que sigues en tu (buena) linea.
ResponderEliminarBs.
Hola Bego!
ResponderEliminarTe dejé un comentario sobre el tito Walt pero no se que pasó que no apareció...
Te sigo leyendo fiel
Besos pa las do niñas poetas de la casa
me gusta mucho este poema. Sin embargo, que importante es la memoria, no importa si los recuerdos son buenos o malos, no crees?
ResponderEliminarun abrazo