FE CIEGA, MUDA Y SORDA...

Dedicado a los poetas, que en estos días, cantan/cuentan de lo suyo, reclaman de lo nuestro y ponen las entrañas al servicio de la lírica.


Todavía no sé
si iré a por el hielo
que darle de comer a mis entrañas.
Es que algo me abrasa
es que ardo
y no tengo ni idea
de como acabar con tanto calor...
He probado a escribir

sólo con mayúsculas
a dejar fermentar las consonantes,
permitirle a las vocales el capricho
de comerse el corazón...
El de cualquiera.
Pero hasta ahora
no me he curado del ardiente suplicio
del endiablado escozor.
Algo me muerde
algo me pellizca
algo me amarga
me roe, me corroe, me desgasta...
Me involucra en la fe,
necesito tenerla,
embadurnarme de fe
ciega, muda y sorda.
Cantar penitente;
evocar al maligno
al benigno...

Y ahora vienes tú
y me dices que el hielo no es la solución,
que evite las corrientes,
y digo, las de aire???
y dices, no!!!

Las de las letras de moda.

6 comentarios:

  1. Begoña, va in crescendo,
    es muy bueno, sobre todo desde "algo me muerde..." hasta el final,
    Un abrazo.

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  2. Gran poema, Begoña. Cada día me gusta más leerte. De verdad, de corazón.

    Besos y abrazos.

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  3. Las corrientes están para dejarse
    el aire para respirarlo hasta cuando no lo hay
    y el fuego para arder.

    Así que arde mi niña, si ese es tu signo, que dice el poeta cubano...arde con todo, pero no te quemes el corazón, y dale todos los caprichos a todas las vocales y diptongos...desde el ai hasta el ui...

    Achuchones ardientes

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  4. Alfaro, la idea es esa, que el poema vaya creciendo, y reviente en la cara del lector, bueno quizás sea demasiado agresivo, pero que provoque...

    Besos.

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  5. Javier, encantada de que te lleguen mis versos, que te dejes seducir por mis palabras. Es tu corazón tan generoso... me dejas, un dulce sabor de boca.

    Cariñitos.

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  6. Trovador, es que soy inevitable, mis ardores son producto del ser consciente y lo que me queman son los versos que tengo la obligación de dejar salir de mi.

    Achuchones varios, pero que no te quemen.

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