EL PREMIO


La sala estaba casi a oscuras, como había calculado. Intentó acomodarse lo mejor posible. No albergaba ningún sentimiento por lo ocurrido y se fue relajando. Lo que necesitaba ahora, era tomar un poco de distancia, dejarse llevar por otra historia, y así lo hizo; se abandonó con embeleso ante las imágenes de la pantalla. Su vida, daría un giro de trescientos sesenta grados en pocas horas...

Le había costado mucho esfuerzo planearlo todo, más de un día entero de idas y venidas, cavilando. Llegar hasta el cine no había sido fácil, aunque era la última sesión de un lunes, por la calle todavía personas dirigiéndose a sus casas, parecían mirarles...
Sujetarla durante el camino y mantenerla en pie, como si nada pasara, le había dejado agotado, sin embargo, no se amedrentó ni un instante, sus deseos estaban a punto de convertirse en realidad. Nunca más, le diría que es lo que podía o no hacer.
Su madre, era la persona más fastidiosa del mundo, la única que le conocía bien y podía castigarle, darle donde más le doliera. Siempre a punto con la escopeta de los reproches cargada, con sus monsergas; comentarios malintencionados, que habían ido minando su autoestima. Desde niño la odiaba, pero dependía de ella, por eso cuando supo que su décimo era el premiado, lo decidió. Su nueva vida le esperaba y cuando se fuera del país, ninguna atadura sentimental quedaría atrás, y huérfano al fin, no daría explicaciones a nadie.


En la butaca de al lado, un quejido hondo, agónico, intentaba llamar su atención...
Echó un vistazo iracundo. Una pierna ensangrentada, rozaba la suya.
-¡Muy bien, mamá! has logrado fastidiarme también la película, y ahora, ¡los zapatos! Pero será lo último...

Miró su reloj y aunque apenas distinguía las manecillas, comprobó que era la hora. Se levantó decidido y caminó hacia la salida.

6 comentarios:

  1. Es tan breve...para lo mucho que cuentas...,
    Se ha cargado a su madre... por fasitidiosa..., y la lleva medio moribunda al cine y la deja allí, en el cine... Tiene su misterio
    Es bueno, breve y bueno. Lo que esta historia daría de sí para escribirla más larga, esas relaciones materno-filiales, el hecho en sí..., aunque todo eso que falta hace que sea misterioso.
    Me gusta.
    Un abrazo.

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  2. Alfaro, La prosa es mi asignatura pendiente, me apetecía ir mostrando algunos cuentos que tengo guardados, y a ver que pasa...
    Si os gustan a lo mejor me voy atraviendo...

    Muchas gracias por pasarte y comentar.

    cariñitos.

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  3. Ah, sí, atrévete, acabo de leer tu comentario en Asperezas, es un gran cuentista, empiezas y nunca sabes dónde te llevará, dónde ni cómo acabará...,hablo de Pepe,
    tu estilo es distinto, breve, misterioso...con el tiempo "pulirás" la forma... irás encontrándote en tu propio estilo, creo que de eso se trata, de encontrar lo propio, lo que te hace ser única.

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  4. Alfaro, muchas gracias, me animan mucho tus palabras y creo que estás en lo cierto. No sé si has leído "El piso de al lado", es el otro cuento que tengo en el blog, me gustaría que le echaras un ojo...

    Gracias, cariñitos.

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  5. Begoña, me ha gustado bastante este relato.
    Los blogs son un campo de pruebas y como tal me gustaría leer algo más de tu prosa. ¡Anímate!

    Besos y abrazos

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  6. javier, puedes leer el otro relato como le digo a Alfaro y me cuentas...
    Muchas gracias por animarme.

    Besazos.

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