respirando la niebla
que acaricia el Duero
y vinieras a recoger
ropa vieja y seca
que mis brazos no alcanzan
Si te llamaras noviembre
escribirías mi nombre
en cada hoja
en cada piedra,
como una oración
en cada fruto maduro, esperanzado
Si te llamaras noviembre
vía crucis delator
marchitos suspiros
derramarían la osadía de vivirme.
Me cubrirías despierta
desnuda
despojada...
y me rendiría ante ti.
Como soy
sin nada
con la fecha en la mano
tendida y sola.
Me ha puesto melancólico, Bego. Si me llamaras, ay, si me llamaras.
ResponderEliminarBs.
¡jODER, bEGO! Me has puesto el vello de punta. ¡Que bueno!
ResponderEliminarEste poema me lo tienes que dejar para colgarlo en mi blog.
Besazo
pero bego tía, que poemazo, que coño nada de minúsculas, POEMAZO, te lo digo en serio, no te miento, te sigo porque me gusta leer lo que haces, pero este poema se lleva la palma. un abrazo
ResponderEliminarBego, si te llamatas Noviembre, realmente es un poema precioso, te impregnas en cada letra, supongo que este noviembre, es especial a su manera, es tu noviembre, de versos entre la niebla del Duero.
ResponderEliminarUn abrazo enorme preciosa, con este poema, me has enamorado de nuevo, de este noviembre que toca a su fin.
Jose, y si tú me dicen ven... Pero mira que eres... Un encanto.
ResponderEliminarPepe, guapo,te he enviado un mail, supongo que no te has enterado.
Ángel mira que eres lindo...
Calipso, mi niña, es que este poema es como una serie de arrumacos para el alma...
Os beso, gracias por acompañarme.
Bego, he irado mi bandeja deentrada y no he recibidotu email. Te dejo mi drección por si acaso: perezazzz@hotmail.com
ResponderEliminarbesazo
No sé que mierda le pasa al teclado que se come las letras y no separa unas palabras de otras
ResponderEliminarPepe, que resulta que a Alfaro le pasa lo mismo, no sé que estoy haciendo mal, bueno intentaré solucionarlo mañana.
ResponderEliminarBesín.